Noticias País – Estados Unidos, Davenport (Florida).- Mark Raymond Gibbon, ciudadano británico de 62 años, fue detenido sin derecho a fianza en el estado de Florida tras protagonizar un grave episodio de violencia familiar que tuvo lugar la noche del domingo en el complejo turístico Solterra Resort, ubicado en Davenport, condado de Polk.
Las autoridades locales informaron que el individuo enfrenta cargos por intento de homicidio y agresión agravada, luego de un incidente que, según la Oficina del Sheriff del condado, puso en riesgo la vida de su nuera, Jasmine Wyld.
De acuerdo con el informe oficial citado por el medio estadounidense People, el altercado se originó durante una discusión privada entre Gibbon y Wyld, relacionada con el contenido del testamento del acusado.
Lo que comenzó como una discrepancia verbal en un entorno vacacional, derivó en una situación crítica ocurrida dentro de la piscina de la residencia familiar, mientras otros miembros del grupo se encontraban presentes.
La escena fue presenciada por varios testigos, entre ellos la hija de Wyld, una menor de 9 años, quien habría presenciado desde el interior de la casa cómo su abuelo sujetaba a su madre con ambas manos por la cabeza para sumergirla repetidamente bajo el agua.
La niña corrió hacia la piscina y, en un acto desesperado, se lanzó al agua para intentar separarlos, recibiendo un empujón de parte de Gibbon mientras intentaba auxiliar a su madre. La intervención inmediata de otros familiares presentes permitió detener la situación y pedir asistencia al 911.
Según los registros de la Oficina del Sheriff, el ataque dejó como saldo lesiones visibles en el pecho de Wyld, consistentes con arañazos producto del forcejeo, aunque no se reportaron daños mayores. La víctima manifestó que temió por su vida durante el suceso.
Gibbon, por su parte, no presentaba heridas al momento de su detención y, en declaraciones posteriores, admitió haber empujado a su nuera bajo el agua, aunque sostuvo que no tuvo la intención de causarle daño grave.
El relato de una testigo directa fue clave para sustentar la acusación. La mujer observó desde una corta distancia cómo el sospechoso presionaba la cabeza de Wyld contra el agua, mientras la víctima intentaba liberarse.
Asustada por el posible desenlace, pidió a otra persona que alertara a los servicios de emergencia, lo que permitió que agentes llegaran rápidamente al lugar.
Actualmente, Mark Gibbon permanece bajo custodia en el centro de detención del condado de Polk, mientras la fiscalía revisa las evidencias para definir los cargos formales.
El proceso judicial podría avanzar en los próximos días. Las autoridades también informaron que la familia está recibiendo acompañamiento psicosocial, debido al impacto emocional que el evento tuvo especialmente en la menor involucrada.
El caso sigue bajo investigación y, hasta el momento, las únicas declaraciones oficiales disponibles son las contenidas en el reporte policial y las entrevistas ofrecidas por los implicados. La secuencia de hechos interrumpió lo que debía ser una reunión familiar de descanso, transformándola en un proceso legal en curso en territorio estadounidense.
