Santo Domingo.- El presidente Luis Abinader se definió como un político de centro que defiende una socialdemocracia moderna, y quiere que se le reconozca como un presidente “reformador y honesto”.
Dijo que espera no fallarle al país en la solución urgente de las graves crisis como la del Covid-19 y muchas otras que vienen de atrás, y la que está atravesando el país.
El mandatario habló así en una entrevista que concedió al periódico El País, durante la cual fue abordado sobre los principales retos de su gobierno y cómo se propone enfrentarlos.
Apoya causales aborto. Declaró que el embarazo en niñas y adolescentes; comportamientos machistas violentos, y la ineficacia de los programas sociales, han sido una traba para el desarrollo de la equidad de género en el país.
En cuanto al aborto, dijo estar en desacuerdo, como todo el país, con el aborto libre, pero piensa que tienen que haber causales que permitan la interrupción del embarazo. Precisó que esa es la línea oficial de su partido, el Revolucionario Moderno (PRM).
Indicó que aunque se ha avanzado en el tema sobre la violencia de género, se requieren planes de ayuda a las mujeres y darles mucha mayor participación, y él no les va a fallar.
“Ese es un grave problema que requiere de una política de Estado. Somos uno de los países de mayor nivel de violencia de género en Latinoamérica y muy posiblemente competimos en el mundo”, subrayó el presidente de la República.
Agregó que otro de los graves problemas que vienen de atrás y que requiere solución urgente es el de la corrupción administrativa.
“Mire, voy a adelantarme unos años. Si yo quiero que se me reconozca por algo, es por ser un presidente reformador y honesto. Estamos haciendo cambios como nunca antes en la República Dominicana. Hemos eliminado estructuras corrompidas y abierto la transparencia en toda la administración pública. Yo le quiero dar a este país un shock de institucionalidad y modernidad”, dijo el presidente Abinader al periodista Jan Martínez Ahrens.
COVID bajo control .- El Mandatario sostuvo que la pandemia en el país está bajo control , destacando que la letalidad a causa del virus es de las más bajas.
Informó que la ocupación de las camas destinadas al covid ronda el 30%; la de las camas UCI, el 50%, y los ventiladores, el 40%, y se han tomado medidas para aumentar la capacidad.
Resaltó que además “tenemos un preacuerdo con AstraZeneca-Oxford y estamos pendientes de cualquier avance con la OMS. También tenemos toda la logística preparada para la vacunación”.
Respecto del impacto de la pandemia en la economía el presidente dijo que el país va a terminar este año con una caída del 6% del PIB, pero piensa que para el 2021 podrá recuperarse completamente.
“De momento, a excepción del turismo, ya se está en proceso de crecimiento, como indica que los ingresos tributarios de octubre y de noviembre fueran mayores que los de 2019. Con el turismo, quizá animado por las primeras vacunaciones, estamos viendo un repunte de las reservas desde Estados Unidos…”
Politica exterior. Sobre las relaciones con el nuevo gobierno de los Estados Unidos, el presidente Abinader dijo creer que no habrán mayores cambios.
“Estados Unidos es nuestro principal socio comercial y nuestro principal emisor de turistas a la República Dominicana. La relación es estratégica y en ambos partidos tenemos amigos”, reiteró. Respecto de China, Abinader sostuvo que es un país importante “y mantendremos una buena relación. pero vamos a ser francos: en esta nueva guerra fría nosotros hemos de tener una relación estratégica con Estados Unidos”, agregó.
Asimismo, dijo que la relación de República Dominicana con Cuba continuará igual “independientemente de cualquier otro país”.
CON HAITI. El presidente Abinader dijo que en el caso de Haití República Dominicana sigue “cargando pesado” porque todo lo que ocurre en el vecino país nos afecta.
Reiteró que la solución a esa problemática es que la comunidad internacional pueda ayudar no solamente a donar hospitales allá, sino también a gestionarlos.
“… tenemos buenas relaciones con el presidente Jovenel Moïse y su Gobierno, pero nuestro interés es canalizar a través de la comunidad internacional toda la ayuda posible a Haití, tanto en términos sanitarios como institucionales. Vamos a llamar la atención para ello, porque si la comunidad internacional se puede cansar, nosotros no: todo lo que pasa allá nos afecta a nosotros aquí. Y estamos cargando pesado…”, puntualizó.