La aerolínea Bahamasair anunció este miércoles la suspensión de todos sus vuelos hacia Haití, luego de los ataques armados sufridos por aviones de Spirit Airlines y JetBlue en las cercanías de Puerto Príncipe, la capital haitiana. Esta decisión fue comunicada por Chester Cooper, viceprimer ministro y ministro de Turismo, Aviación e Inversiones de Bahamas, quien destacó que la medida busca garantizar la seguridad de los pasajeros y de la tripulación.
En una rueda de prensa, Cooper explicó: "Debido a los recientes acontecimientos, hemos decidido suspender los vuelos a Cabo Haitiano hasta nuevo aviso". A pesar de que este destino es considerado más seguro que Puerto Príncipe, la aerolínea ha optado por mantener una evaluación constante de las condiciones en el terreno antes de reanudar los servicios. "No tomamos la seguridad a la ligera; siempre será nuestra norma cancelar un vuelo si consideramos que el terreno es inestable", enfatizó el ministro.
El incidente que detonó esta decisión ocurrió el lunes, cuando un avión de Spirit Airlines, procedente de Fort Lauderdale, Florida, fue impactado por disparos mientras se aproximaba al Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture en Puerto Príncipe. El ataque causó heridas leves a un miembro de la tripulación y obligó al desvío de la aeronave hacia la República Dominicana. Ante estos eventos, la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos prohibió el martes los vuelos comerciales hacia Haití.
Otras aerolíneas estadounidenses como JetBlue y American Airlines también suspendieron sus operaciones hacia Haití, sumándose a una decisión previamente adoptada por Spirit, que extenderá la cancelación de sus vuelos hasta diciembre. El aeropuerto de Puerto Príncipe fue cerrado temporalmente este lunes debido al recrudecimiento de la violencia perpetrada por bandas armadas que controlan gran parte de la capital haitiana.
La escalada de violencia coincide con la reciente designación de Alix Didier Fils Aimé como primer ministro por el Consejo Presidencial de Transición, en sustitución de Garry Conille. Este tipo de enfrentamientos ya había ocasionado el cierre del aeropuerto entre febrero y mayo de este año, tras un incremento en los ataques contra instituciones, comercios y la población civil, además de la fuga masiva de reos en asaltos a cárceles controladas por las bandas.