WASHINGTON – El fiscal especial Jack Smith y su equipo anunciaron su intención de renunciar antes de que el presidente electo Donald Trump asuma el cargo, según confirmó una fuente cercana al caso. La decisión surge en medio de los dos procesos penales federales abiertos contra Trump, donde el Departamento de Justicia ha sostenido que no puede procesar a un presidente en funciones.
El anuncio fue reportado inicialmente por The New York Times, generando interrogantes sobre si el informe final de Smith, donde detalla las decisiones sobre las acusaciones, se publicará antes de la toma de posesión presidencial. De acuerdo con las normas del Departamento de Justicia, Smith debe remitir un informe confidencial al fiscal general Merrick Garland, quien tendrá la potestad de decidir si hacerlo público.
A finales de octubre, Trump declaró en una entrevista radial que despediría a Smith de inmediato si resultaba reelegido. "Es muy fácil: lo despediría en dos segundos", afirmó, argumentando que cuenta con "inmunidad en la Corte Suprema". Tras la victoria electoral de Trump, el caso de interferencia electoral contra él, supervisado por un juez federal, recibió una prórroga hasta el 2 de diciembre para determinar cómo proceder.
Entre los casos abiertos contra Trump, destaca el relacionado con su intento de revertir las elecciones de 2020. Este proceso se ha visto afectado por decisiones judiciales que limitaron las pruebas admisibles debido a la inmunidad presidencial. En paralelo, Trump enfrenta acusaciones en Florida por la supuesta retención de documentos clasificados, aunque ese caso fue desestimado por un juez federal, quien cuestionó la legalidad del nombramiento de Smith.
Desde el inicio de los procedimientos, Smith había prometido avanzar rápidamente hacia el juicio. Sin embargo, el equipo legal de Trump logró retrasar significativamente los procesos. Mientras tanto, las dudas sobre el futuro legal de los co-conspiradores mencionados en las acusaciones permanecen sin resolución, ya que no existen normativas que impidan procesarlos por su conexión con un presidente entrante.
El panorama legal en torno a Trump continúa evolucionando, mientras la renuncia de Smith podría marcar un punto crucial en la estrategia del Departamento de Justicia frente a los casos pendientes.